El ecosistema (todas las comunidades de organismos vivos que se encuentran en un lugar específico, sus hábitats y sus interacciones) en el que vivimos proporciona servicios naturales para los humanos y todas las demás especies que son esenciales para nuestra salud, calidad de vida y supervivencia. Por ejemplo, nuestros bosques eliminan el dióxido de carbono y otros contaminantes del aire que respiramos y también enfrían la temperatura del aire, reduciendo la formación de ozono a nivel del suelo, un contaminante que puede empeorar los problemas cardíacos y pulmonares; nuestros humedales almacenan aguas pluviales, filtran y producen contaminantes inofensivos para las aguas pluviales y recargan nuestros acuíferos (de donde la mayoría de nosotros obtenemos el agua potable) con estas aguas filtradas; y los sistemas de dunas en nuestras playas forman barreras naturales para las olas de tormenta y proporcionan un hábitat importante y formas de viaje para la vida silvestre.
A continuación se presentan tres objetivos ambientales que son fundamentales para lograr sociedades sostenibles y ser buenos administradores del medio ambiente, algunos de sus beneficios económicos, sociales y ambientales, y algunas de las acciones que podemos tomar para lograr estos objetivos.
Hay muchas formas sencillas de ser más sostenible. Todos somos criaturas de hábitos y cambiar nuestro comportamiento lleva algún tiempo. Los pequeños pasos son clave, y una vez que descubra lo fácil que es cada uno, se sorprenderá de lo rápido que puede marcar una diferencia positiva en la protección de nuestro medio ambiente para su familia y su planeta. Explore nuestro sitio web para obtener consejos e información sobre sostenibilidad.